Hay una algo muy cierto y es que cada persona que trata de emprender a veces medita mucho las cosas. Esta en ese punto donde todas las opiniones o lecturas que realiza se las toma de forma muy analítica y sobre todo muy personal, llevando a cuestionar todo lo que tiene en la cabeza. Te digo algo, para porque no es sano.
Ciertamente se debe realizar un estudio previo del sector en el cual quieren ingresar, crear estrategias, estar atento a las tendencias, pero sucede que cada vez que encuentras una cuenta relacionada a tu nicho de mercado te hace pensar “cómo llegar a esto”, “creo que no tengo lo suficiente aún para iniciar”, ahora te digo no te preocupes por eso. Cada persona tiene un ritmo para hacer las cosas, no te presiones.
Por eso hoy decido socializar contigo algunas cosas que me ayudaron a tomar nuevamente este camino emprendedor, que en las condiciones de hoy día es difícil sostenerse, más no imposible:
- ¿Te suena absurdo? Bueno déjame decirte que la paciencia es la fuente de energía más valiosa con la que contarás en todo el camino que estás por iniciar. Ella te ayudará a darle la vuelta a las cosas, a mirar las redes sociales de tu competencia de forma objetiva y a diseñar estrategias que te ayuden a alcanzar cada uno de los peldaños de tus objetivos. No importa el tipo de emprendimiento tengas, aplica para todo.
- Sí aún no consigues la forma en organizar tus pensamientos y/o actividades de forma correcta esta palabra será tu herramienta maestra. A veces nos imaginamos como máquinas perfectas escribiendo en un Excel o una libreta el modo en que trabajamos, pero… pasados unos días caemos en depresión porque te das cuenta qué no seguiste nada de lo que escribiste. Pero tranquilo, la cuestión e ir intentando una y otra vez hasta que descubras ese método que te funciona a ti, pero no sale reflejado en Google.
- Sentirse incomodo con lo que haces es la peor sensación del mundo, y si estás emprendiendo tienes que sentirte a plenitud contigo y con tus ideas. ¡Deja que fluyan, el mundo es tuyo!
Ahora sí vamos a la parte sería… no mentiras
- Lúcete. No con el mundo, no con tu vecino o esa competencia directa que ya conoces personalmente. Lúcete contigo mismo, haz eso que te hace sentir bien y que sabes que vas a proyectar de forma positiva a tu comunidad digital mientras te diviertes.
- Los errores son un componente común de todo emprendedor, sí hasta del más exitoso, entonces acepta cada error que tengas sea logístico, gramatical, interpersonal, todos. Esto te ayuda a aprender a como manejar las situaciones que se te presenten de forma diferente.
- No tomes nada personal. Esto es algo que me ha costado aprender a lo largo de los años. Y créeme que mientras escribo esto sigo pensando que me falta mucho, pero poco a poco lo irás logrando. Recuerda que hay comentarios mal intencionados y justamente esos son los que te tomas a pecho. Pero tú, tranquilo. Dale la vuelta a esto y míralo en retrospectiva, busca lo positivo del asunto y pasa la página.
- Sé tu mismo. No imites porque a una persona le funciona algo que te gustó, emprender implica de mucha personalidad, estilo, dedicación, desvelo y de una reconquista contante de lo que haces.
¿Te sirvió de algo? Entonces comparte, quizás alguien más pueda aprovecharlo también.
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